Al llegar al restaurante el “Buen Sabor” en Biblián, el visitante puede
encontrar la sonrisa y el trato amable de su propietaria Alicia Ortiz,
quien desde hace 22 años se dedica a la preparación de exquisitos platos de la gastronomía ecuatoriana.
Tiene dos hijas y una nieta. Inició con su negocio en un pequeño bar de salchipapas y colas, pero la aceptación de sus clientes y el trabajo diario le han significado un progreso importante en su vida.
Estudió Secretariado Bilingüe. La vida le enseño a distribuir su tiempo entre el trabajo y la tarea de ser madre. En su rostro se dibuja un poco de tristeza al recordar que fueron tiempos difíciles que tuvo que enfrentar sola.
Alicia, dice “Me siento orgullosa de ser mujer”. Mi vocación es servir a los demás. “las mujeres somos fuerza y todos los días tenemos que ser valientes para surgir en esta sociedad aunque estemos solas”.
Tiene dos hijas y una nieta. Inició con su negocio en un pequeño bar de salchipapas y colas, pero la aceptación de sus clientes y el trabajo diario le han significado un progreso importante en su vida.
Estudió Secretariado Bilingüe. La vida le enseño a distribuir su tiempo entre el trabajo y la tarea de ser madre. En su rostro se dibuja un poco de tristeza al recordar que fueron tiempos difíciles que tuvo que enfrentar sola.
Alicia, dice “Me siento orgullosa de ser mujer”. Mi vocación es servir a los demás. “las mujeres somos fuerza y todos los días tenemos que ser valientes para surgir en esta sociedad aunque estemos solas”.
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