Desde hace un año, la terminal interprovincial ha sufrido un grave deterioro en los pisos. El patio de salida y estacionamiento de buses está deteriorado, debido a la falta de drenaje de aguas servidas.
Los desagües, pozos de tratamiento y sumideros resultan un problema para conductores y pasajeros, debido a la gran cantidad de lodo y el empozamiento de agua, que no permiten un desenvolvimiento correcto de las unidades de transporte. (PV)
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