Para
dar un mejor servicio trabajan en horarios de lunes a domingo de 08:00 a 22:00,
y con más intensidad los fines de semana que tienen que lavar uniformes de los
padres y niños de escuela.
Las empleadas domésticas eran las que
lavaban la ropa de los dueños de casa, pero desde que se decretó el pago de un
salario básico, las amas de casa han optado por utilizar el servicio del lavado
industrial.
Ahora, luego de llegar del trabajo, tienen
tiempo de dedicarse a los quehaceres domésticos y revisar los deberes de los
hijos. Además están conscientes que adquirir una lavadora tiene un costo
elevado, y para ello se necesita financiar de alguna manera.
Fernando Serrano, ex trabajador de Industrias
Guapán, que fue despedido hace dos años y después de analizar las necesidades
de la población, concluyó que el lavado de ropa era una necesidad que se
presentaba en todos los hogares, por lo que decidió invertir su dinero y crear
su propio negocio.
Con una inversión
superior a los 60 mil dólares, en la compra de 5 lavadoras y 6 secadoras
industriales importadas desde Estados Unidos, que ofrece el servicio de
lavandería en su local y trae y lleva la ropa a domicilio.
Con la ayuda de su
esposa Nube Sigüenza y sus hijos: Fernando y Macarena han hecho que este
negocio salga adelante y cada vez tenga mayor acogida.
Tan solo con una
llamada telefónica, vamos a cualquier domicilio de la ciudad y traemos la ropa
y luego por la tarde la entregamos lista para usar y sin recargo en los costos.
El proceso de lavado
inicia con la colocación de la ropa en una tina con agua donde se le friega los
puños, cuellos y bordes, luego se le introduce en la lavadora por 30 minutos, y
se concluye con el secado, en donde el calor deja la ropa suave, fragante, listas para usar sin tener la necesidad de
planchar algunas prendas.
En caso de que la ropa
haya sido manchada con esfero, grasa, sangre y manteca, por tan solo 0,25
centavos eliminamos estas imperfecciones. Se lava todo tipo de ropa, cortinas,
edredones, forros de carro.
Para dar un mejor
servicio y como todos me conocen tenemos que trabajar duro con horarios de lunes
a domingo de 08:00 a 22:00, señala Fernando Serrano.
Los fines de semana son
los más trabajosos porque la mayoría de clientes acumulan lo ocupado en la
semana, más los uniformes de los padres e hijos para mandarlos a lavar y por lo
general lo quieren como máximo que les entreguemos el domingo.
Como anécdota cuenta
que incluso le llegan mensajes de texto de sus clientes con un “llámame que no
tengo saldo” y tiene que devolver la llamada para saber de quién se trata y
donde tiene que recoger la ropa.
Con su negocio ubicado
en las calles 3 de Noviembre y Guayas espera seguir brindando un servicio de
calidad, rápido y eficiente, garantizando el cuidado de las prendas de vestir. (VGS)
No hay comentarios:
Publicar un comentario