La zona céntrica
de Azogues donde hay gran actividad comercial y la ubicación de dependencias públicas
y privadas, así como iglesias, parques y plazas, todos los días luce una imagen
desalentadora y deprimente por la cantidad de ebrios que duermen en las veredas
y calles durante el día.
Resulta
difícil para la gente caminar, por cuanto en plena vía pública o en las veredas
están tirados interrumpiendo el paso a transeúntes, que en muchas ocasiones
tienen que saltar o cruzarse de verada para esquivar a los ebrios.
Los sábados y
domingos son los días en lo que se nota una mayor cantidad de ebrios durmiendo
en el “centro histórico” de Azogues. En muchos de los casos en el mismo lugar
hacen sus necesidades biológicas, produciendo olores insoportables. (PV)
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